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Ante un horizonte económico prometedor, según el banco Mundial

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El Banco Mundial ha emitido recientemente su Informe Económico Regional para América Latina y el Caribe, titulado “Competencia: ¿El ingrediente que falta para crecer?”, destacando una perspectiva económica favorable para la República Dominicana. Con estimaciones de crecimiento cercanas al 5.1% para 2024 y un sostenido 5.0% para los años 2025 y 2026, el país se posiciona como una de las economías con mejor desempeño en la región.

Según William Maloney, economista jefe para América Latina y el Caribe del Grupo Banco Mundial, la economía dominicana se beneficia de una significativa inversión extranjera, aunque no en el sector manufacturero como ocurre en Costa Rica. A pesar de esto, el país experimenta un crecimiento en el sector de servicios, que junto a la inversión en hotelería y energías renovables, marcan una diversificación económica estratégica. Este panorama positivo se da incluso frente a desafíos como la situación en Haití, evidenciando la resiliencia de la economía dominicana.

El informe resalta el dinamismo del sector de Inversión Extranjera Directa (IED), especialmente en minería, pero apunta a una evolución hacia la diversificación con proyectos recientes en hotelería y energías renovables. Esto refleja un giro estratégico importante para la economía del país. En 2023, la IED alcanzó los 4,381 millones de dólares, con un incremento interanual de aproximadamente 9.2%.

A pesar de algunos sectores con desempeño negativo en 2023, la economía cerró el año con un crecimiento del 2.4%, apoyado principalmente en la construcción, zonas francas, y el sector hotelero. Este crecimiento, aunque moderado, supera las expectativas en el contexto latinoamericano y se proyecta que continúe en ascenso.

El panorama económico se ve impactado por factores externos como las crisis geopolíticas y la fluctuación de los precios internacionales, lo que ha llevado al Banco Central a priorizar la estabilidad de precios sobre el crecimiento económico. Sin embargo, con estímulos y políticas adecuadas, se espera una recuperación sostenida.

Economistas consultados por medios locales como Listín Diario apuntan a la necesidad de reformas estructurales en áreas como el trabajo, la electricidad, el transporte y la fiscalidad para fomentar un desarrollo más robusto y sostenible. La diversidad de opiniones subraya la importancia de políticas integradoras que fomenten la competitividad y el desarrollo económico.

En síntesis, se enfrenta a un futuro económico prometedor, con desafíos significativos pero también con claras oportunidades de crecimiento y desarrollo. La diversificación económica, junto con una estrategia enfocada en la estabilidad y el crecimiento sostenido, posiciona al país como un líder económico en la región de América Latina y el Caribe.


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