Crisis Energética: Hurto y crecimiento poblacional elevan pérdidas a 53.6%
La Empresa Distribuidora de Electricidad del Este (Edeeste) enfrenta una situación crítica con un registro de pérdidas energéticas del 53.6% durante el periodo de enero a noviembre de 2023, según declaraciones de Manuel Mejía Naut, gerente interino de la institución. Este desbalance se atribuye principalmente al hurto de energía y a un significativo aumento poblacional, factores que complican la gestión y distribución eficiente del recurso eléctrico en la región.
Mejía Naut destacó que el problema radica en las pérdidas no técnicas, originadas por conexiones ilegales y fallos en los sistemas de medición y facturación. Actualmente, se estima que existen 652,000 suministros conectados de forma ilegal, un desafío que impide la reducción de estas pérdidas. No obstante, el gerente aseguró que se está cubriendo el 95% de la demanda energética, mostrando un esfuerzo por mantener la operatividad a pesar de las adversidades.
Para enfrentar este escenario, Edeeste está desarrollando estrategias, como el diseño de un proyecto de carta masiva dirigido a regularizar las conexiones ilegales, buscando integrar a estos usuarios dentro del marco legal y contractual. Este enfoque busca mejorar la eficiencia en la distribución de energía y reducir las pérdidas significativas que afectan a la empresa y, por ende, a la economía y bienestar de la población dominicana.
El Ministerio de Energía y Minas (MEM) corroboró la situación en su Informe de Desempeño de las Empresas Eléctricas Estatales, señalando a Edeeste como la distribuidora con mayor pérdida de energía de las tres existentes en el país, evidenciando un incremento del 46.4% en 2022 al 53.6% en 2023. Este deterioro se ve exacerbado por el crecimiento de la densidad poblacional en las áreas de servicio de Edeeste, que ha experimentado un crecimiento aproximado del 11% entre 2022 y 2023, ampliando la demanda sobre un sistema eléctrico nacional que presenta deficiencias históricas y falta de planificación acorde a las necesidades crecientes.
La situación energética en el pais refleja los desafíos de administrar un recurso vital en medio de crecimiento demográfico y prácticas ilegales, exigiendo medidas urgentes y efectivas para garantizar la sostenibilidad y eficiencia del servicio eléctrico en el país.