INTERNACIONALES

En la frontera de Texas: La controversia de las barreras y el impacto en los migrantes y la comunidad local

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En el sur de Texas, la productora de nueces pecanas, Magali Urbina, enfrenta una escena recurrente: familias de migrantes deshidratados y heridos en su propiedad, Heavenly Farms. Frente a ella, agentes de la Patrulla Fronteriza asisten a una familia venezolana desesperada por cruzar el Río Bravo. Esta situación es el resultado de la estrategia fronteriza del gobernador de Texas, Greg Abbott, conocida como “Operación Estrella Solitaria”.

La operación busca frenar el ingreso ilegal de migrantes y el tráfico de drogas mediante la implementación de barreras flotantes en el río, alambres de púas y la presencia de fuerzas policiales. Sin embargo, esta estrategia ha sido objeto de críticas por parte del gobierno de Biden, que ha calificado de “abominables” y “despreciables” los maltratos denunciados por migrantes a manos de los uniformados de Texas.

Eagle Pass, un pequeño pueblo al otro lado del Río Bravo, se encuentra atrapado entre los dos frentes de este debate. Las autoridades locales se han apoderado de uno de los principales parques de la ciudad y han desplegado las controvertidas boyas en el río. Esta medida ha generado tensiones y protestas locales y federales, además de una denuncia diplomática de México.

La granja de nueces pecanas de la familia Urbina ha sido afectada directamente por la operación, ya que las autoridades estatales tomaron los bordes exteriores de la propiedad para colocar barricadas y alambre de púas. Los niveles de producción se han visto afectados debido al constante movimiento de vehículos militares.

La operación ha generado opiniones divididas en la comunidad de Eagle Pass. Algunos apoyan una frontera fuerte, pero critican las tácticas de Abbott, mientras que otros señalan los beneficios económicos generados por la presencia de fuerzas policiales y personal uniformado en hoteles y restaurantes locales.

El debate sobre la Operación Estrella Solitaria continúa, y algunos habitantes temen que sus voces queden relegadas en medio del debate político. Instan a las autoridades a escuchar las preocupaciones locales y a considerar el impacto humano y económico de la estrategia fronteriza.


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