Luis Miguel: Esperado concierto suspendido por problemas técnicos
El tan anticipado concierto de Luis Miguel, programado para la noche de este miércoles en el Estadio Olímpico, ha sido pospuesto inesperadamente para el jueves 18 de enero a las 8:00 PM. La decisión se tomó “debido a inconvenientes de fuerza mayor”, tal como informó el equipo de producción del evento, parte de la gira Luis Miguel Tour 2024.
La expectativa era alta, el estadio estaba lleno de fanáticos ansiosos por ver al artista. Sin embargo, tras horas de espera y con un anuncio de “problemas técnicos” en las pantallas gigantes del estadio, la situación tomó un giro inesperado. Pasadas las 11:00 PM, el equipo comenzó a desmontar los equipos del escenario y a las 11:17 PM se anunció oficialmente la suspensión del concierto. Ya para ese momento, una parte del público, agotada por la espera, había comenzado a retirarse.
Los organizadores aseguraron a los asistentes que las entradas adquiridas serán válidas para la nueva fecha. Sin embargo, la falta de detalles específicos sobre los problemas técnicos generó frustración entre los asistentes. Un portavoz del evento indicó que fue imposible resolver el inconveniente presentado, instando a los asistentes a contactar a Uepa Tickets y Pav Events para más información.
Pav Events, mediante un comunicado en redes sociales, pidió disculpas por los inconvenientes causados por la posposición del evento, citando la calidad y los requerimientos de una producción de esta magnitud como razones para la difícil decisión tomada.
El interés por este concierto de Luis Miguel fue evidente desde el inicio, con la venta de boletas agotándose en cuestión de horas. Los precios variaban desde RD$3,800 para las gradas hasta RD$26,765 para la zona Special Guest.
Una fuente confiable reveló a Diario Libre que el problema central fue el daño sufrido por una pantalla central, crucial para el espectáculo. Se mencionó que el propio Luis Miguel había establecido las 11:00 PM como plazo para resolver el problema, de lo contrario no subiría al escenario.
La situación generó descontento entre los asistentes, con expresiones de molestia y abucheos ante la falta de comunicación y la demora en tomar una decisión. Muchos optaron por quedarse en el estadio, esperando que disminuyera la multitud para salir con más tranquilidad y terminar sus bebidas.
Sin embargo, hay preocupación entre aquellos que no podrán asistir al concierto reprogramado debido a compromisos previos, con varios usuarios en las redes sociales de Pav Events exigiendo un reembolso.
La mala organización no solo se evidenció con el problema técnico. Las largas filas y el tráfico en los alrededores del estadio antes del evento ya habían causado molestias entre los asistentes. Algunos sugirieron que la llegada tardía de muchos podría haber contribuido al caos, y se reportaron problemas con los scanners para las entradas digitales, un inconveniente ya experimentado en otros conciertos masivos.