Pakistán ordena a 1.7 millones de residentes Afganos que abandonen el país en un contexto de tensión creciente
Pakistán ha emitido un ultimátum, exigiendo que 1.7 millones de afganos que residen en el país sin la debida documentación deben partir antes del 1 de noviembre o enfrentar la deportación. Esta medida se produce mientras se establecen una serie de centros de retención en todo Pakistán para hacer cumplir la fecha límite. Expertos legales y organizaciones de derechos humanos describen esta acción como un endurecimiento sin precedentes.
Pakistán ha sido anfitrión de una de las poblaciones de refugiados más grandes del mundo, con millones de afganos buscando refugio allí a lo largo de décadas de conflicto. Sin embargo, las relaciones entre Pakistán y Afganistán se han deteriorado desde que los talibanes tomaron el control en agosto de 2021, lo que ha llevado a un aumento de las tensiones y al sentimiento anti-afgano.
El gobierno paquistaní ha justificado las deportaciones como necesarias para salvaguardar el “bienestar y la seguridad” de la nación. Esta decisión sigue a un período de dificultades económicas prolongadas y un aumento de los conflictos transfronterizos. La embajada de Afganistán en Islamabad ha criticado las acciones de Pakistán, calificándolas de “acosadoras”.
Aproximadamente 1.3 millones de afganos en Pakistán son refugiados registrados, y otros 880,000 poseen un estatus legal para residir en el país, según las Naciones Unidas. Sin embargo, el gobierno paquistaní sostiene que otros 1.7 millones de afganos residen en el país de manera irregular.
En las últimas semanas, alrededor de 60,000 afganos han regresado “voluntariamente” a Afganistán a través de la frontera, según lo informado por Feroz Jamal, portavoz del gobierno de la provincia de Khyber Pakhtunkhwa.
Los afganos que intentan regresar a Afganistán están sujetos a regulaciones estrictas. Se les permite cruzar la frontera con pertenencias limitadas y un máximo de 50,000 rupias paquistaníes (aproximadamente $178), y se les exige dejar atrás su ganado.
La situación ha generado preocupaciones tanto a nivel nacional como internacional sobre el bienestar de los residentes afganos y las crecientes tensiones entre Pakistán y Afganistán. El futuro de estas comunidades afganas en Pakistán permanece incierto.